
Hoy hace 15 años, mis
padres daban gracias a
Dios por mi llegada.
Agradezco a Dios,
porque durante estos
maravillosos años, he
sido una niña rodeada
de amor, felicidad y cariño
de ellos y de toda mi familia
en cada paso que he dado.
Soy la princesa real de
un cuento de hadas,
creado en el libro de mi
existencia; donde hoy con fé,
doy un gran paso de la
mano de Dios, para poder
extender aún más
mis hermosas alas.
Gracias a cada persona que
me acompaña y es parte
de este único, especial y
maravilloso día, que este
momento perdure en ustedes,
así como lo hará en mi
corazón por siempre.
